Monomania vs. Monomania
Deerhunter
regresó a las pistas muy temprano este 2013. Tras el enorme Halcyon Digest, que
coronó magníficamente el último trimestre de 2010, todos sus fans estábamos
expectantes ante su regreso, aunque nuestra hambre había sido saciada en parte
por los trabajos en solitario de Bradford Cox, el alma máter de la banda y de
Lockett Pundt, su doble opuesto, que en este blog comentamos ampliamente. Aún
con tanto material, no podíamos predecir el próximo movimiento de la genial banda.
No los torturo más, señores y doy paso a la reseña más esperada por la cofradía
Deerhunter que lee C & F.
Neon
Junkyard abre el álbum y es bastante amable comparada con
Earthquake, el inicio de Halcyon
Digest. Su letra, que habla de encontrar valor en lo que todos desprecian, es una
temática clásica de Bradford (Quickcanal en Logos).
“Finding the fluorescence in
the junk/ By night illuminates the day”
"Encontrando la fluorescencia en la basura/ por la noche ilumina el día"
Leather
Jacket II Si la anterior canción era casi amable,
esta composición ruidista es la que hace carne las declaraciones de la banda
antes del lanzamiento “es un disco de Garage Rock Nocturno”. Como si Deerhunter
aún fuera esa banda anónima y loca de Weird Era Continued. Van dos canciones de
Monomania y no sabemos que esperar.
“Open up my heart/Tell me if
you see/some meaning”
"Abre mi corazón/ Cuéntame si ves/ algún significado"
The Missing es, sin dudas, el momento Lockett del álbum e injustamente
considerada como un lado B de Spooky Action. Digo injusta, porque es una
excelente y preciosa canción: Tan pulida, espacial y ligera que contrasta en
todo el sentido de la palabra con las canciones precedentes. Mientras en Monomania
como álbum algo no encaja, ha nacido un grower que abre una sección más
cohesiva del disco. Dream Captain vuelve a abrazar ese
delicioso sonido retro pop y lleno de capas de los mejores pasajes de Halcyon
Digest. Es un buen tema. La corriente de la conciencia, método con el que
Bradford escribe sus líricas da resultados aquí, logrando una de las
composiciones más accesibles y de letras memorables como: “I’m a boy, man/ And
you’re a man, man”.
“The women that I'd loved had
took another man/Well nothing ever ends up quite like what you planned”
"La mujer que amé ha tomado a otro hombre/ bueno nunca nada termina tal como lo planeaste"
Luego, la profundamente gringa Pensacola mantiene el nivel. Uno de los aspectos más interesantes
de Bradford Cox como intérprete es su capacidad de crear personajes. En un
momento puede parecer un muchachito de 15 y al siguiente sonar como un anciano
de un pueblo perdido de USA, calvo y engañado por la mujer que ama, como en
esta canción. Melodía muy ad-hoc para irme al trabajo =).
“My kid brother was insane/insane”
"Mi hermano pequeño estaba mal de la cabeza"
Blue Agent abandona la rusticidad del tema anterior y corta la afortunada
secuencia, haciéndose un poco cargante y repetitiva. Su outro demuestra que podría
haber sido mucho mejor musicalmente hablando. Sin embargo, su letra es muy
interesante: "Soy una luz azul, soy un tullido, cobarde" muy sincera,
muy dolorosa. Luego la extraña dulzura de T.H.M.
nos conquista y conmueve. Su aparente sencillez e intimidad es coherente con su
temática: el suicidio de un hermano menor, y un hermano mayor tratando de entender
que lo motivó a ello. Ay Bradford ¿porque tu vida tiene que ser tan triste? T.H.M. es el primer
eslabón de la sección más deslumbrante del álbum.
"I'd been looking for some
harmonies/Some words to sing that could
really bring/The lonely-hearted some
company/All the people that were just
like me, yeah"
"He estado buscando unas armonías/ algunas palabras para cantar que lleven/ compañía a los corazones solitarios/ toda esa gente que es igual a mí, yeah"
Tras ese momento salido de la recámara de Bradford, nos golpea la mejor canción
de Monomania. Perfectamente
construida, Sleepwalking acorde a
acorde combina dream pop playero sin dejar de sonar irreal, contextualizando este
himno inmenso al desamor que asemeja al desengaño con despertar de un sueño.
Grandioso inicio con ese "No estoy molesto por nada/ (aunque) me forzaste a un sueño sin esperanza", mi frase musical favorita de 2013 y una hermosa estrofa final con superposición de capas.
"You and me/ You broke free/ You broke me/And you left me thrown to
pieces”
"Tú y yo/ tú terminaste conmigo/ eso me rompió/ y me dejaste hecho pedazos"
Back To The
Middle es una gran sucesora que toma una veta
más vintage, debido al uso de un pandero y algo que suena como un órgano. El
puente de guitarra que hay al medio de la canción es delicioso, el mejor
del álbum para mí, sin contar otra letra redonda que habla de lo que se siente
tras una ruptura: "de vuelta en el medio/ aquí es donde el amor me
dejó". Es lo que yo llamo “Sufrir por amor mirando un atardecer en la
playa con wayfarers”: padecer, pero con estilo.
“And in my head/ there is
something rotting dead/ i can't compete with her/ let me be released from this/
mono-monomania”
"Y en mi cabeza/ hay algo muerto pudriéndose/ deja liberarme de esta/ mono - monomania"
Monomania al inicio no me dijo mucho, pero con el tiempo me he
enamorado de ella. Si Sleepwalking es desengaño y Back To The Middle es dolor,
Monomania es rabia. Empieza proponiendo una aventura amorosa - y gay, hay que decirlo- para
terminar con un "envía mi corazón al mar/ oh, el vacío mar", o sea
“ya no me importa”. Termina con un “no puedo competir con ella”, que puede ser
válido para una rival en el amor o una idea obsesiva: soledad, nunca encontrar
el amor, la idea de que determinada actividad o persona es lo único que no hará
felices.
El cambio en medio de la canción es sorprendente y efectivo. Y aun
así no anticipa la locura final y me gusta lo que significa: afecto en vano,
dedicación, intensidad malgastada, enfocada en la dirección incorrecta, como
fuego que termina consumiendo todo. Y para mí de esa es la interpretación
correcta de la palabra que nombra este trabajo y lo que se busca transmitir, no
la de diccionario que sale en todas las reseñas. Debe ser inmensa en directo
(ahora gracias a The Postal Service, nunca lo sabremos de primera fuente xD, hasta
que vengan a Chile algún día ^^).
"I was a dream, a dream, a
dream of myself"
"Yo era un sueño, un sueño, un sueño de mí mismo"
Nitebike es el momento intimista necesario tras la catarsis de Monomania.
Es linda, un grower que regresa a las aguas más calmas de Parallax, pero
reflejando esos aullidos de lobo espacial que solo Bradford puede dar, con una
interpretación que termina cautivando. De Punk (La Vie Anterieure) mucho han
destacado el carácter autobiográfico de su letra, pero a mí me intriga lo engañosa
que es: comienza algo monótona, pero se reivindica a medida que agrega capas de
efectos a las cuerdas. No es un mal final, pero solo
parece digno tras la gran secuencia anterior.
Monomania a la primera escucha es chocante y extraño, porque no le
interesa contar una historia a través de su secuenciación. Tiene grandes
momentos, pero aislados y disímiles en estilo. Por otro lado,
solo a ratos logra ese sonido nítido y mágico de su predecesor. Quizás la explicación esté en que es el reflejo fiel de lo que es
actualmente Deerhunter. Con Josh Fauver fuera y dos nuevos miembros, no podemos
decir que sea la misma banda de 2010. Bradford declaró que no tenía idea de
donde vivía Fauver (y que esta partida lo hizo temer por la continuidad de Deerhunter), pero lo que sea que hacía aquél en la banda, se ha echado
de menos. Como si ya no hubiera represas para contener y encauzar la
creatividad desbocada de su líder, esta a ratos tiñe de intimidad la obra
colectiva.
Si indagamos en el título del álbum, notamos que efectivamente
cuenta una historia, pero que solo puede entenderse al conocer la historia de
vida de su líder. A primera vista la monomanía en este disco, es una fijación
con el éxito amoroso ( a Brad no le ha ido muy bien
en esas lides, como a mí, o a cualquiera, en algún momento de la vida que a veces dura para
siempre). Por otro lado, está su afán obsesivo por
escribir canciones. La monomanía afectiva se refleja en las letras -ideas fijas
y recurrentes sobre pérdidas de familiares y rupturas sentimentales- , y supera
a la monomanía musical que se refleja en las melodías. Sé que en esas 300
canciones que Cox tenía escritas antes de empezar a trabajar en Monomania había
temas mejores que Blue Agent o Leather Jacket II, por decir algunas. Quizás es que
en los discos anteriores, la banda afinaba y daba cuerpo a las ideas de su líder,
logrando composiciones retro-avant garde (oxímoron, problem?) en las que se podía habitar, casi
tangibles. Bradford dijo al respecto que "Algunas de mis favoritas no lograron estar en el álbum. Algunas canciones que no pensé que valieran la pena lograron estar en el álbum. Algunas canciones sobre las que todos pensábamos que eran las mejores, no lograron llegar al álbum. No sé como eso va a resultar". Esa podría ser la explicación.
Pero Monomania solo necesitaba tiempo para poder ser apreciado en su
justa medida, razón principal para postergar esta reseña, tiempo que en mi
opinión es retribuido. La tosquedad y aleatoriedad inicial ceden mostrando una
riqueza, irreverencia y disfrute insospechados. Este es un buen álbum que no tiene la culpa de cargar con las desmedidas expectativas
que caen sobre su banda. C
Nota: 85/100
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