Deerhunter - Halcyon Digest (2010)

Mi primer acercamiento a la música de Bradford Cox fue tan sutil como poco exitoso. No le presté demasiada atención a “Quickcanal” (de su proyecto solista Atlas Sound) cuando F me la enseñó (en ese momento no me llegó, quizás no estaba para cosas tan superiores), pero si a “Walkabout”, su colaboración con Panda Bear de Animal Collective, que fue parte de mi BSO del verano…pero el interés nunca creció. Atlas Sound era para mí un ente, Bradford Cox no existía y por eso nunca hice la conexión con Deerhunter, a quienes jamás había escuchado (¡que mal!). Hasta que me atrapó el video de “Helicopter” hace un mes. De ahí no paré de investigar, fascinarme y castigarme por mi ignorancia XD. Bajé este y la primera parte de su disco doble anterior “Microcastle/Weird Era Cont.” que es buenísimo y valorado por la crítica.

 

Pero es imposible seguir hablando de Deerhunter sin hablar de Bradford (26), su vocalista. Él es uno de los músicos más fascinantes de nuestro tiempo. Tiene una historia personal que bordea lo trágico: padece Síndrome de Marfan, que explica su apariencia, altura, delgadez y pecho cóncavo, entre otras cosas. Sufrió abandono y abusos desde muy niño. Oscila entre la asexualidad y la homosexualidad platónica* Actualmente lleva una vida tan común como la de cualquiera cuando no está de gira (comiendo pizza mientras ve películas repetidas en la TV, actualizando su blog y carreteando en pubs locales con sus amiguis)** y sus entrevistas son para él conversaciones que duran horas (Cuidado, Bradford, te estoy psicopateando).

Bradford es a Deerhunter lo que Zooey es a She & Him.

Él ha plasmado toda su experiencia de vida en buena música y buenas líricas, ya sea en Deerhunter como en Atlas Sound, que nos entregó el año pasado el alabado “Logos”. Bradford, quien declara no tener la energía para tener una relación amorosa, derrocha creatividad musical y le hace falta tiempo para entregarle su talento al mundo. Si un tipo de este calibre, junto a su grupo (Lockett Pundt, Moses Archuleta y Josh Fauver) , decide hacer un disco que se dedique a explorar el tema de la memoria, los recuerdos y de cómo en el fondo vamos editando, suavizando y/o cubriendo de arena las cosas malas (e inventando algunas cosas buenas) hasta contarnos a nosotros mismos un “Resumen Idílico” (halcyon digest) de nuestro pasado, es algo que merece toda mi atención.  Vamos a la acostumbrada...

*Se cree q su confusión nace de haber visto a Kris Novoselic y Kurt Cobain besándose en un bar.
**Esto se agradece en tiempos en que los músicos venden la pomada de “hey, somos igual que tú” (pero con talento, una banda exitosa y carretes internacionales con estilosos amigos músicos) o la contraria “oye, soy lo más, adórame” (Lady Gárgara).

...Revisión Track por Track:
Comienza todo denso con 01.Earthquake (buena analogía del año 2010 en Chile) pero no se asusten, esta atmósfera densa y enrarecida no es la predominante en el álbum (Esta intro es vilenta y extraña, como si entráramos de lleno en la mente de otra persona y nos fuéramos adentrando).

En 02.Don’t Cry, Bradford parece reconfortar al niño triste que probablemente aún lleva dentro de sí (“pequeño niño, no necesitas llorar ni saber las razones”). En este tema el álbum comienza a tomar bríos y suena algo más optimista, dejándonos bien preparados para 03.Revival, ya comentada por F, que es claramente una de las mejores canciones del año. Con influencias musicales más antiguas que las anteriores (que nos adentra en “el pasado”) y un formato más convencional, esta es una canción que probablemente alude irónicamente a una conversión de tipo religioso.

 

04.Sailing es EL lento del disco (como dice F). Si fuera la época de esplendor de los lentos, solo querría bailar esta canción. Tiene algo de romanticismo y habla de cómo el temor puede llevarte a un estado de aislamiento (¿fobia social?). Y de cómo en la vida “aprendes a aceptar las cosas que está en tu alcance obtener”

En 05.Memory Boy volvemos a la animación, pero no se engañen por el ritmo optimista, porque esta canción es sobre un pequeño que recrimina cáusticamente el abandono de su padre, como si ya no le doliera: “Déjame refrescar mi memoria, te veo yéndote…oh, no olvides tu televisor”.

 

El tema que sigue no es de Interpol XD. Bradford descansa en 06.Desire Lines y le da el pase a Lockett Pundt en vocales para el tema que logra una lírica sencilla a lo Beatles “come with me, uohoo, far way, uohuo, every day, uohuo” y su final psicodélico es el momento en que el álbum hace una concesión al dejarte divagar con tus recuerdos más queridos.

Ensoñación pura, eso es 07.Basement Scene (“Sueña un pequeño sueño”). Esta es una meditación sobre la amistad a través del tiempo (de como las relaciones van cambiando y/o se rompen) y de cómo al envejecer hay cosas que ya no nos importan tanto.

08.Helicopter es sobresaliente, nada en las agitadas aguas de una persona solitaria que está en los últimos momentos de su vida y recapitula sus verdades más dolorosas: “Nadie se preocupa por mí, no tengo compañía, mis necesidades son mínimas...”. A pesar de ser tan descorazonadora (está basada en la historia ficticia de un prostituto ruso del autor Dennis Cooper), es musicalmente rica y hermosa. Es como el momento 10 Miles Stereo del Teen Dream.

 

09.Fountain Stairs es una especie de interludio a la última patita de HD y la voz de Lockett parece venir desde los 60's, en la canción que menos luce del álbum.

10.Coronado es mi (más) favorita. Sus acordes iniciales, la voz cascada de Bradford y de repente un saxo sacado del baúl de los 70's son una cachetada de buena música. Su letra, para mí, alude a la supuesta salvación que nos ofrecen algunos tratamientos médicos u operaciones (Corríjanme si traduzco/interpreto mal).

 

Fan made :)

Dedicada al fallecido músico Jay Reatard, 11.He Would Have Laughed (“Él se hubiera reído”) es una canción difícil de interpretar y llama la atención desde sus primeros acordes, tomando ese sonido algo acuático, pero pop ya explorado en 08.Helicopter y 01.Earthquake.

Y así termina Halcyon Digest, tan súbitamente como cuando prenden las luces en lo mejor de la fiesta y te echan del local. Dejándote la impresión de que Deerhunter es un grupo que aún tiene más por entregar, pero decide retirarse sabiamente en su mejor momento. Y te dan ganas de que el álbum sea más largo. Y piensas que si durara tres veces lo que dura el Mellon Collie... de los Smashing Pumpkins, aún se te haría corto.

Porque Halcyon Digest realmente es el reciclaje idílico de toda la buena música del pasado pasada por la procesadora electrónica del presente. No soy tan culta musicalmente como para decir “esta canción está influida por x grupo”; pero tampoco, tan ignorante como para decir que la música de Deerhunter es algo nuevo. Lo que sí puedo asegurar es que es tan fresca y violenta como sentir de golpe el aire marino en la mañana.

Estamos ante un disco más prístino y menos ensimismado que Microcastle. Refrena sus impulsos para desatarlos en los momentos precisos (10.Coronado, 06.Desire Lines) sin perder la esencia de los trabajos anteriores. Por lo tanto su mensaje llega claro hacia nosotros. Las repeticiones en letras y arreglos ilustran bien la idea de que la memoria es subjetiva y que hace hincapié en algunos recuerdos, o sentimientos propios de una época, de forma casi enferma (05.Memory Boy, 08.Helicopter).Y como ésta nos brinda una atmósfera cambiante que va constantemente entre pasado, presente y distintos estados de ánimo, sin orden, ni ley, ni límites. El video de 08.Helicopter (cuya idea y producción fue idea de BC) también nutre esta idea: escenas en B & N con imágenes superpuestas. También toca el tema de la idealización y de los recuerdos inventados

Tengo muchos tracks preferidos y me es difícil decidir cual es el mejor. Como dice Bradford, “Ellos no van a creer que tengo recuerdos favoritos” y debido a su historia de vida, es cierto que cuesta creerlo. Pero esa misma historia es la que hace que HD tenga una razón de ser, una cuota importante de realidad y un peso emotivo.

Este álbum también nos plantea un desafío como auditores, porque nos hace preguntarnos: ¿Qué versión de mi vida me estoy contando?, ¿Tengo un recuerdo favorito?, ¿Es mi resumen, idílico? Personalmente, no tengo respuestas inmediatas y esto demuestra que estamos ante un disco con un concepto ambicioso y complicado, que debió abordarse con agallas. Pero tanto musical como líricamente, este disco lo resuelve bien y va aún más allá, porque nos entrega una revisión del pasado en muchos planos: vivencial, conceptual, de la trayectoria musical de sus integrantes y de la historia de la música. Es por esta razón que Halcyon Digest se sitúa comodamente entre los mejores discos del 2010. Apenas pueda me lo compraré. C