Ahora que terminó El Laberinto de
Alicia, quedamos un poco desorientados por la gran oferta de teleseries
nocturnas. ¿Por qué estos canales chilenos se empecinan por ofrecer las mismas
cosas al mismo tiempo? En fin. Peleles ya lleva un tiempo (pésima elección de fecha de estreno) y, aunque no avance mucho, ponerse al día da un poco de pereza. Su Nombre Es Joaquín, de TVN, confirma lo cuático que se ha puesto este canal. Me atrevo a decir que busca inspiración en la programación más freak de Discovery Home & Health (léase 4 Esposas, Un Marido; No Sabía Que Estaba Embarazada y otros por el estilo) y esto, luego de la densa temática de El Laberinto de Alicia y su aburrido desarrollo en su parte media, hace que no tengamos mucha energía para entusiasmarnos con esta nueva nocturna. Y llegamos a La Doña , de CHV.
Cuando comencé a verla,
tuve que enfrentarme a los prejuicios que tenía de ella: una novela simplona y
calentona, hecha a la medida para el lucimiento de Claudia Di Girolamo y llena de fallidos intentos de “fidelidad” a
la época retratada (como por ejemplo, el acento español de Manuel Rodríguez, El Guerrillero Del Amor). Acá están mis apreciaciones ¿se confirmará el prejuicio?