Psíquicos (CHV): El programa paranormal que el Chile 2012 esperaba

Imágenes vía www.chilevisión.cl

Todo indica que la fiebre del talento ya está dejando paso a una nueva moda televisiva. Inexplicablemente, tras dos años del terremoto del 27 de febrero, un período que ha estado lleno de las naturales réplicas, la gente está más confiada en que sucederá otro evento de iguales o peores características (poco probable, pero no imposible, por lo menos en el norte). 
Puede que sea el efecto de acercarnos a la fecha de término del calendario maya, diciembre 2012 que la televisión chilena haya pasado de la conspiranoia a secas (vía Salfate) a las teorías seudo científicas relativas a terremotos artificiales (vía Salfate, again), para desembocar en lo paranormal a secas y sus temas clásicos: percepciones extrasensoriales, mensajes del más allá, personas muertas que no quieren “irse” (un antecedente claro de esto es el incidente del programa Mañaneras (La Red), donde se aseguraba que la presencia del fallecido Felipe Camiroaga aún se sentía en el set del Buenos Días a Todos). Psíquicos, el nuevo estelar de CHV, no podía tener un mejor marco referencial.

Están entre losotroh

El primer Reality Paranormal chileno: El programa ha reclutado a 10 personas (o parejas) con capacidades extrasensoriales y distintos métodos, quienes deben sortear numerosas pruebas que les permitirán comprobar el alcance y la veracidad de sus “poderes” cada semana. Cada semana se irá eliminado el participante que tenga el peor desempeño en las pruebas semanales. El que demuestre mayor cantidad de aciertos, o simplemente lo haga mejor que los demás, programa a programa, ganará este concurso, con el crédito y reconocimiento ante todo Chile que esto le traerá.

"Ay Dios, por que soy tan rico"

Conductores: Ellos son el periodista ancla de CHV Iván Núñez, primo chileno del vocalista de Maroon 5 (ambos se levantan mirándose al espejo y repitiendo “que rico que soy”), el vago de Pablo Mackenna, quien le da la cuota de escepticismo necesaria al show, casi siempre monitoreando las pruebas mirando la pantalla desde un sillón y opinando/trolleando casi como si estuviera en su casa “pero que está haciendo este wn ohh” o “¿con que nos va a sorprender “Jesucristo-diosmío-santoseñor” hoy? (su apodo  para Albán, un participante que se caracteriza por repetir constantemente frases por el estilo) ”. Ambos están acompañados y asesorados por el ucraniano Yaroslav “León” Popovich, experto en temas paranormales y autor de la idea original de este programa. Este último, con su acento argentino y presencia calmada, asesora a los chilenos aportando el toque “alternativo” que esta realización necesita.

León Popovich, el asesor paranormal y Pablo Mackenna, este último actúa como Beavis y Butthead en una sola persona

Estructura: En general, la estructura del programa está tan bien desarrollada televisivamente, que me sorprendí mucho al descubrir que se trata una idea original. Pensé que era un formato importado del extranjero, sin mentir. El programa dedica ¾ a condensar las 3 pruebas semanales y su último cuarto está destinado a la evaluación y selección de los participantes.

La delegación gitana en Psíquicos

Primero, muestra alguna prueba de precisión que se desarrolle en espacios amplios al aire libre y que puede involucrar la presencia de algún voluntario humano que se expone a riesgos si los mentalistas fallan. Ejemplos de esto son: la prueba del estacionamiento, donde debían indicar en que auto se encontraba el objeto personal del psíquico; la prueba del lote vacío donde debían posarse sobre el punto preciso donde se encontraba un voluntario enterrado bajo tierra. La más impactante de este tipo de pruebas fue la de los ensacados, donde debían distinguir entre 5 bultos de forma humana, cual de ellos era un maniquí y prenderle fuego. Si se equivocaban, quemaban a una persona real.

El Señor de la Querencia

La segunda prueba es de adivinación, con un carácter más profundo y personal, es el plato fuerte del programa. En esta, los mentalistas deben relacionarse a ojos vendados con una persona u objeto conocido en el país y deducir de este limitado contacto, de quién se trata. Al final, el objeto les es revelado a los participantes. Al tratarse de alguna celebridad/obra conocida, el televidente se hace cómplice y es puesto en un cierto contexto, pasando automáticamente a poseer más datos que el psíquico y pudendo comprobar de forma más o menos creíble si el mentalista fue acertado en su cometido. En el episodio que participó Paulina Nin, los psíquicos lograron percibir muchas cosas, incluso llegando a descubrir de quien se trataba antes de la revelación del personaje.

Porque las fashion bloggers también pueden tener poderes paranormales

Otro momento televisivo potente fue cuando tuvieron que descubrir ante que obra de arte se encontraban, la cual era ni más ni menos el famoso cuadro de Bruno Amadio, El Niño Que Llora. Las reacciones de los psíquicos reforzaron y explicaron en parte esa leyenda negra que rodea al cuadro y muchos de ellos adivinaron antes de que obra se trataba.

La tercera prueba también es sobre percepción, pero menos personal, es más liviana y probablemente la más olvidable. La prueba de esto es que la única que recuerdo es aquella donde los participantes se enfrentaban a numerosas portadas de diarios ocultas y debían indicar si la noticia de la portada era positiva o negativa y aventurar de qué tema se trataba. Uno de ellos dijo “esta portada me da pena, se trata de una persona que no se ha ido aún” y quedó para adentro cuando le mostraron la portada que hablaba de la muerte de Felipe Camiroaga.

Un psíquico toqueteando a Bachelet

Finalmente, los conductores junto al invitado famoso de turno evalúan el desempeño de cada participante en estas tres pruebas y deciden quién es el ganador y quién es el perdedor de la semana.

"Edmundo tiene que salir del programa"

Luego reúnen a los participantes en la terraza de la casona de Amor Ciego, les revelan los fundamentos de su decisión y tanto el ganador, como el eliminado hacen sus descargos frente a la cámara. En esto adopta un formato similar al de otros realities de talento extranjeros como Design Star, America’s Next Top Model o Top Chef.

"Armando Loyola, partiste a jugarte un loto"

Participantes y personajes: El sabor del programa son los participantes. De diversas edades, aunque con un predominio de personas mayores, cada uno posee una técnica especial para lograr percepciones. Métodos que hasta este programa no tenía idea que existieran como la Tabacomancia (una señora que fuma y deposita las cenizas en una hoja de papel que luego interpreta), un caballero que maneja unas varillas, otro que realiza un croquis, etc. Aunque a veces logran aciertos sorprendentes, también fallan estruendosamente y chamullan como locos cuando saben que se equivocaron. Muchos logran desempeños mediocres que les bastan para salvarse.

De izq. a der: César el Ingeniero, Katara, Cristina la psíquica &  fashion blogger, Iván Nuñez, Patricia la Sra. Tabacomancia, Pablo Mackenna, Santi el Dibujante, Elizabeth Peña y León Popovich.

Las orgásmicas hermanas Peña

Más allá de si sus poderes son verídicos o se trata de simples charlatanes, todos son verdaderos personajes. En cada emisión conocemos más de sus fortalezas o debilidades (precisión, percepción, comunicación con el más allá, etc.), pero principalmente, sus personalidades. Y pucha que son conflictivos los psíquicos: las envidias, críticas y acusaciones de “falsedad” entre ellos mismos son pan de cada semana.

Albán, más conocido como Dios mío-Jesús-Santo Señor

Marcando pauta: Otro factor que habla del éxito de un programa es si su temática trasciende a su programa de origen. Psíquicos, además del favorable contexto televisivo en el cual se sitúa, ha marcado pauta en nuestras pobres pantallas. Las estaciones rivales han reforzado esta onda paranormal regalándonos segmentos completos dedicados a banalizarla.

La imagen habla por sí sola (vía @televisivamente)

Algunos de ellos, momentos televisivos de culto como el del pasado jueves 10 de mayo En SAV. Para que vean que ni la farándula se arruga para hablar de espíritus y apariciones. En ese programa las Hermanas Peña aseguraron tras una fallida sesión con Pamela Jiles para demostrar sus poderes, que ella poseía “un alma oscura”. Ante las sutiles burlas y comentarios escépticos que la periodista realizaba, esta discusión delirante fue incrementándose al entrar en ella otros miembros del panel como la insoportable Patty Maldonado. Ver a Pamela Jiles suplicando irónicamente para que le “devolvieran su alma” no tiene precio.

Otra muestra de esta tendencia fue el desfile de mentalistas que pasó por diversos programas para discutir y resucitar el caso Gervasio, especialmente en Mentiras Verdaderas. Este programa cuya pauta está marcada por la contingencia del país, le dio tribuna por ¡una semana completa! a esa fuente taan confiable que es Peter Rock (quien no tiene parentesco alguno con PedroPiedra, por suerte), que aseguraba haber recibido un mensaje del más allá de su amigo Gervasio. Peter, te lo diremos en buena: si fueran tan amigo suyo, o lo dejarías descansar en paz o buscarías verdadera justicia para su familia, no figurar en la TV por medio del tema.

Un verdadero amigo es el que lucra con tu muerte en Primer Plano

Conclusión: Psíquicos es una agradable sorpresa, más aun al considerar el canal penca que lo emite. Es una realización chilena profesionalmente ejecutada bajo los cánones de los buenos realities de talento en el cable. Fue estrenado en el mejor momento posible y entretiene a escépticos y creyentes de lo paranormal por igual. Material chileno de exportación, queremos verlo en Infinito o Syfy, donde le pegaría mil PLRs a sus realities fantasmales como Ghost Hunters. Lástima que compita con el invencible Mundos Opuestos. C

Psíquicos (actualmente en etapa post-repechaje)

Lunes a las 22:30 hrs

CHV