The Knife / Shaking The Habitual

Arte shuper conceptual

Vivimos tiempos ocupados en C & F. Queremos compensar nuestro pobre aporte al blog en este último tiempo con breves reseñas de algunos de los discos lanzados durante el ajetreado mes de abril. Debe ser uno de los meses más recargados de esperados regresos en el último tiempo incluyendo los nuevos discos de consagrados como Phoenix, The Knife y Yeah Yeah Yeahs, artistas indies de larga trayectoria como Iron & Wine y Kurt Vile y otros que buscan la consagración como James Blake. En la primera reseña de esta semana, analizamos un disco que aún debe estar causando opiniones encontradas: Shaking The Habitual, lo nuevo de The Knife, luego de 7 años de receso.

Los hermanos suecos Karin y Olof Dreijer nos entregan su cuarto disco, una obra ambiciosa, de una inusual duración de 98 minutos. Es justamente esa sensación de ir contra lo establecido y las convenciones lo que se respira a lo largo de Shaking The Habitual, ya sea criticando movimientos conservadores, hablando sobre el feminismo y la identidad de género (aludida tanto en la letra como en el video de Full of Fire) o en su  continúa experimentación rítmica, que a nadie dejará indiferente. Las canciones más "normales" y más accesibles son aquellas con percusiones y arreglos africanos como la excelente A Tooth for an Eye o Without You My Life Would Be Boring, que justamente poseen una estructura mucho más tradicional, con algo que podríamos reconocer como una melodía. 

Rewrite history/ to suit our needs
Open my country/A tooth for an eye...

Cuando entramos a terrenos de experimentación puro, los resultados son más dispares. Mientras Full of Fire o Raging Lung aprovechan muy bien sus 10 minutos para construir atmósferas (distorsionadas en la primera y más misteriosas en la segunda), los 20 minutos de Old Dreams Waiting To Be Realised se sienten como un capricho de artista postmoderno, que probablemente tenga un concepto muy claro un su mente pero que puede ser demasiado abstracto e incluso aburrido para aquel que no logre captar el mensaje. Así este disco encontrará ávidos oyentes entre antiguos fans de la banda o gente interesada en sonidos experimentales pero difícilmente sería recomendable para un público más general, cosa que se adivina no estaba entre los objetivos de este duo (ellos han hecho manifiesto que no les interesa en lo absoluto el éxito comercial). 

A handful of elf pee /That's my soul

spray it all over / fill the bowl

Es un disco denso, complejo, con interludios innecesarios (Crake y Oryx), pasajes desconcertantes (A Cherry On Top) e incluso ridículos (Fracking Fluid Injection). Tampoco posee una coherencia estructural que ayude a querer escuchar el disco en orden secuencial. A pesar de estos defectos, que ahuyentaran a muchos, Shaking The Habitual es una propuesta valiente, con muchos momentos de creatividad desbordante como la instrumental Networking nos demuestra que aún es posible innovar en la electrónica y logradas atmósferas que incluso resultan emotivas (Wrap Your Arms Around Me, Ready To Lose). Vale la pena escucharlo aunque sea para hacerse una idea de la que es definitivamente una de las obras más controvertidas pero a la vez indispensables a la hora de hablar de la música del 2013. F

I regret every time I raised my voice/ And it wouldn't be that bright of me to say I had no choice/ I can kiss your eyes your hair your neck/
Until we forget

Canciones indispensables: A Tooth for an Eye, Without You My Life Would Be Boring, Wrap Your Arms Around Me, Raging Lung, Full of Fire, Networking

Nota: 80/100 (a pesar de los momentos incomprensibles y aburridos)