Los sospechosos de "El Laberinto de Alicia"

Después del fin de Primera Dama pensamos que ninguna novela nos llamaría la atención. El Laberinto de Alicia se veía tan turbia e inquietante que nos resistimos a verla en principio. Sin embargo,  nos devolvió la fe en las nocturnas de TVN que venían de dos productos bien débiles como Conde Vrolok y 40 y Tantos. El Laberinto de Alicia nos ha seducido con un drama bien contado, lleno de tensión y paranoia, poniendo el polémico tema de la pedofilia como tema central y adaptando la misma formula de Donde Esta Elisa? donde el culpable se encuentra dentro de un grupo cerrado ABC1.  Tiene un guión que se acerca más a una serie policial aunque mantiene algunos elementos del género  como el triangulo (o cuadrado) amoroso alrededor de Alicia.

Pancho Reyes ahora hace del Comisario Rivas XD

Si bien en un comienzo la relación tipo Silencio de los Inocentes entre Alicia y su mentor Navarenko se sentía una copia descarada con el tiempo ha ido ganando fuerza y se ha desarrollado de forma interesante. Otros personajes destacables son Manuel, el ex esposo de Alicia, un rol donde por fin Pancho Reyes puede destacar y hasta resultar divertido con su manera agresiva de interrogar a la gente (cuando le preguntó a Octavio  si era parte del grupo de mamones de la naturaleza, no pude evitar reír). También se roba la película la siempre al borde de la histeria Sofia (una notable Amparo Noguera), que ante cada descubrimiento sórdido sobre su hija Valentina parece que le va a pegar hasta que confiese quien abusó de ella.

Puntos débiles:

Maite Orsini aporta menos que Maura Rivera a Mi Nombre Es XD

El elenco juvenil es un relleno innecesario. Hay atisbos interesantes en la relación entre Santiago y su padre Octavio pero todo el núcleo adolescente no está bien integrado con el mundo adulto. Tampoco hay una reflexión sobre como se educan esos hijos ABC1 como se hacía en Donde Esta Elisa?. En un principio, Max, el supuesto hijo perfecto pero que le vende drogas a su primo, pareció tener un rol más preponderante pero carece de una historia propia que genere interés. Ni hablar de Maite Orsini, cuya existencia hasta ahora es inexplicable. Además, es bastante poco probable que alguno de ellos este implicado en los casos de abusos como indican los recientes descubrimientos en la trama.

Mensaje creepy...

La novela aun no logra convertirse en el hit que todos ven. El riesgo al poner toda la teleserie en función de la pedofilia le pasó la cuenta. La trama es demasiado tensa y el tema aún muy escabroso para algunos. Le hacen falta historias secundarias que giren en torno a otro tema (como el núcleo gay de Elisa) y un aire más cotidiano o realista. ¿De verdad todos los personajes viven todo el día preocupados de un pedófilo? ¿Tienen alguna meta en su vida o trabajo?. Se entiende que es una opción narrativa y reduccionista más cercana a una serie gringa pero esos detalles podrían facilitar la vista a los más temerosos.

Los niños actúan pésimo. En especial, Dominga la hija de Alicia, cuyas líneas llegan a dar risa por lo sobreactuadas. Para que hablar de la Valentina que apenas modula. Al menos, se agradece lo cuidadosos que han sido en mostrar a los niños en situaciones turbias pero a veces echan a perder escenas que podrían haber sido perfectas.

Los sospechosos

Navarenko ya sabe quien es "Carlitos"

El perfil del abusador que maneja la investigación de la novela implica una posible víctima de abuso, que fue alumno del Shelter School y además es un seguidor en las sombras del pedófilo Vladimir Navarenko. Sabemos que maneja el nickname de Carlitos y buscaba en Navarenko una nueva imagen “paterna” luego de la muerte de Harold Harper. Además tiene una evidente obsesión por Alicia, la otra ahijada de Navarenko pero en el lado de la justicia.  Sería un hombre de mundo, que se sabe desenvolver socialmente y con una personalidad atractiva para los niños. En el capítulo del jueves 5 de mayo, Navarenko reveló que el sospechoso no fuma y además se encontraba presente durante la comida del Shelter School. ¿A quien reconoció como Carlitos en el video? Falta poco para conocer al culpable  y acá ponemos en evidencia a los personajes más sospechosos de El Laberinto de Alicia.

Esteban Gallagher (Marcelo Alonso)

Sospechoso número 1 para C & F. Lo delata su sospechosa cercanía con Alicia, que le permite prever todos los pasos de la investigación. Cada vez que entra en escena tiene cara de culpable. En los últimos capítulos, lo hemos visto revisando la carpeta de los chats entre Carlitos y Navarenko y en conocimiento del operativo ocurrido en la cena del Shelter School. Incluso en los primeros episodios mantuvo comunicación con Navarenko supuestamente para alejarlo de Alicia. La sorpresa que mostró este último al descubrir a Carlitos en el video podría ser debido a la cercanía que mantiene con Alicia. Además, los guionistas nos han ocultado su paradero en muchos pasajes fundamentales de la novela. Estudió en el Shelter School y evidentemente existe la posibilidad de que haya sido abusado por Mister Harper al igual que Gregorio y Octavio (aunque este último lo niegue). Ha mantenido un perfil demasiado bajo hasta ahora y  su trabajo en publicidad le permite tener contacto frecuentemente con niños. Agreguemos a su prontuario, su viudez prematura y su crianza en solitario de Maite Orsini, un personaje que hasta ahora ha sido EL aporte de esta novela. Elucubrando teorías ridículas,  ¿Habrá algún secreto oscuro en el pasado de Esteban? ¿Podría ser su hija, su propia cómplice? ¿Ah?

Baltazar Andrade (Bastian Bodenhofer)

Pasar de ser un profanador de cunas en 40 y Tantos para convertirse en el pedófilo de esta novela podría parecer casi una broma pero con las nocturnas de TVN nunca se sabe. Baltazar se negó en primera instancia a aceptar el peligro al que se encontraba expuesta su hija Valentina lo que claramente pudo ser un intento de tratar de pasar inadvertido. Además, ser un pediatra y un profesional de la salud con acceso a todo tipo de tranquilizantes y drogas lo convierten en un sospechoso con todas sus letras. Hace rato que no pasa nada en su matrimonio con Sofia y, aunque fuera un giro demasiado turbio, Valentina podría estar encubriendo a su propio padre. Esto último podría ser apoyado con su comportamiento demasiado tranquilo en comparación a su esposa. Tampoco podemos descartar que haya sido víctima de Mr. Harper.  Lo que nos hace dudar es que las interacciones entre Valentina y su abusador no encajan con alguien que está viviendo en su propia casa (sería un poco ridícula esa obsesión por chatear y hablar con teléfono con una persona que ve todos los días). Por último, Bodenhofer nos regala una de sus clásicas interpretaciones sobreactuadas (nunca tanto como en Conde Vrolok eso sí) por lo que sería una lástima que efectivamente él sea el villano.

Octavio San Martín (Andrés Velasco)

El actual principal sospechoso de la investigación. Sin embargo, nosotros lo tenemos casi descartado por la obviedad de la situación. Todo indica que tal como lo fue Raimundo Dominguez en Donde Está Elisa? es sólo chivo expiatorio con un perfil demasiado similar al del posible abusador. Octavio vive de las apariencias, es egoísta y ególatra. Esconde que Mr. Harper le sacaba fotos en el sótano hasta que se ve obligado a revelarlo. Se casó con Bettina prácticamente para estar cerca de Alicia, con quien se encuentra obsesionado. Y se niega a exponer ante los medios los abusos ocurridos en el Shelter School, hecho a estas alturas inevitable. Las joyas encontradas en posesión de los niños y que pertenecen a él tienen más pinta de ser manera de distraer la atención más que una prueba real. De todos modos, es un personaje bien odioso e insoportable pero un progreso en la actuación generalmente plana de Andrés Velasco.

Gregorio Harper (Alvaro Espinoza)

Partió llamando la atención por su look de Willy Wonka y/o Principe Valiente, lo que de inmediato lo hizo parecer culpable. Pero, Gregorio es una persona dañada que en los últimos capítulos se mostrado más como una víctima que como un victimario. Hasta ahora es el único personaje reconocidamente abusado y por su propio padre adoptivo, el perverso Mr. Harold Harper. Podría ser descartado ya que al momento del abuso de Valentina, se encontraba con arresto domiciliario. Sin embargo, nada nos confirma que el no tenga relación con algún cómplice como podría ser Miss Paula, con quien sostiene una sórdida relación adúltera. Sin embargo, podría ser una jugada maestra de los guionistas para que lo pasemos por alto con su actitud de niño abusado y además crear una coartada para continuar con sus perversiones (requeriría una explicación inteligente y calculadora pero no perdamos la fe en los guionistas). Además en el capítulo del jueves generó el caos con su confirmación pública de los abusos realizados por su padre. ¿Qué pretende verdaderamente Gregorio? ¿Hacer justicia o poner en aprietos a su madre y a todos sus amigos que nunca hicieron nada por él?

Miss Paula Moncada (Adela Secall)

Adela Secall está pasando demasiado piola en su rol de esposa infiel y enamoradísima de Gregorio. Es incondicional a él y podría ser capaz de cualquier cosa para complacerlo. Tiene acceso a los niños en forma permanente y, aunque poco probable, sería una movida arriesgada que el abusador sea mujer.  Si este es el caso, Miss Paula necesita mucho más desarrollo que permita comprender sus motivaciones. En una de esas, esta es solo una teoría paranoica y su personaje termine siendo otro APORTE en El Laberinto de Alicia.

Miss Helen Harper (Gloria Munchmayer)

Nuestro otro sospechoso femenino es la eterna villana de las novelas de los 80, Gloria Munchmayer. Sería un guiño al melodrama clásico que efectivamente ella sea la culpable. Aunque la hemos visto sufrir ante el descubrimiento del abuso de Gregorio y hasta querer quemar todas las cosas de su difunto marido, todo podría ser una pantalla. ¿Sus motivaciones? Además de la popular teoría de que Harold Harper esté vivo y ella sea su complice, podría ser igual de enferma o incluso querer revivir el recuerdo de él a través de estas perversiones. También pensamos que su chofer podría colaborar con ella (incluso podría ser el abusador, pero lo descartamos debido a su ausencia en la cena del Shelter y a que no encaja con el perfil propuesto por la misma novela). Sin embargo, una atenuante para considerar a una de las mujeres como culpable es el hecho de las evidencias de abuso encontradas en Valentina, lo que implica la participación de un hombre. A menos que alguna de estas féminas nos guarde una sorpresa a lo Lady Gaga o le guste usar perturbadores juguetes sexuales, todo indica que su rol es a lo más de facilitadoras del crimen.