5 Discos que deberías estar escuchando (Agosto, 2012)

2012 ha sido un año bastante prolífico en lo musical. 2013 está a la vuelta de la esquina y aún quedan muchos lanzamientos interesantes (lo nuevo de Grizzly Bear, The xx, Crystal Castles, Bat For Lashes), sin contar otros buenísimos discos que nos quedan por comentar (kin, Swing Lo Magellan, channel ORANGE, Gossamer, Shrines, Confess, etc.). Como ven, la lista es interminable y es por eso que hemos decidido seleccionar 5 discos entre los que hemos escuchado durante la primera mitad del año y que no queremos dejar sin destacar.

Esta selección heterogénea va desde los sentimientos encontrados del debut de Tanlines, lo fringe del segundo trabajo de Lower Dens, el anhelo de contacto del tercero de Grimes, la fiesta del quinto esfuerzo de Hot Chip y la épica intimista del cuarto disco de Chromatics. "Para gustos, colores" dicen por ahí y nuestra intención es invitarlos a escuchar con más profundidad el disco que más les haya interesado en esta reseña (si les gustan todos, mejor). Para que en el mes de la gatos escuchen linda música por las noches en vez de los gruñidos y pleitos en los tejados de los animales más lindos del mundo (sorry, amantes de los perros y los delfines).

Tanlines – Mixed Emotions (2012)

Este es el primer trabajo larga duración del dúo formado por los neoyorkinos Eric Emm ( a la izquierda en la portada) y Jesse Cohen. Ellos se conocieron cuando este último participaba en una banda que grababa su música en el estudio del primero. Tras eso, Jesse dejó a su banda para formar el dúo. Después de publicar algunos remixes de canciones ajenas lanzan su primer EP en 2010, Settings, que contenía algunas de las canciones presentes en este trabajo.

Entre las cosas buenas que podemos encontrar en Mixed Emotions, están la voz masculina de Emm, que tiene el potencial de convertirse en el sello del dúo. El álbum se mueve con soltura y mucha libertad por sonidos vintage, específicamente de los 80s y 90s sin dejar de lado algunos estilos más actuales (como el chillwave de Abby). Entremedio pasa por el post rock (Green Grass, Rain Delay), lo afro y balearic de Yes Way, Real Life y esa joya que es Cactus, hasta terminar con el AOR (Album Oriented to Rock) de Nonesuch (un final que recuerda a Beth/Rest de Bon Iver). Esta diversidad le quita identidad al sonido del dúo. Los hits indiscutibles son All of Me, que bebe de la escuela synth pop de Cut Copy y Not The Same, el momento cumbre de Mixed Emotions. Un grito desesperado al ritmo del house, tan grande como How Deep Is Your Love, de The Rapture.

Las letras son sencillas y directas, por lo cual es fácil conectarse con ellas y seguirlas. También reflejan el título del álbum: existencialismo, quiebres sentimentales, gente que cambia (o no) con el paso del tiempo, dudas, momentos de calma, negación y también de alegría. Si bien el trabajo de Tanlines no es el sonido más original que hayamos escuchado, ya que bebe de New Order (En Brothers) y de grupos más actuales como Hurts, Washed Out y Cut Copy, muestra algunos chispazos de genialidad, específicamente en la fusión del afro con el electro pop y la capacidad de crear hits. Virtudes que auguran un buen porvenir para Tanlines, mientras mantengan ese enfoque  poco pretencioso.

Canciones Imprescindibles: All Of Me, Abby, Not The Same, Real Life, Cactus.
Nota: 78/100

Lower Dens – Nootropics (2012)

Ya les habíamos hablado un poco de los chicos de Lower Dens en el post de las canciones destacadas de julio. Este quinteto gringo, liderado por la andrógina Jana Hunter, está conformado también por Will Adams, Geoff Graham, Nate Nelson y Carter Tanton.  Su primer trabajo, Twin-Hand Movement (2010), ya dejaba intuir el potencial de la banda, según la mayoría de los medios especializados.

Nootropics es un disco que si no fuera por la presencia de la voz de Hunter, calzaría perfecto en la definición de “atmosférico”, concepto que ya es un cliché dentro de la crítica musical. Desde el primer track el álbum deja en evidencia su énfasis en los guitarreos y percusiones, especialmente en el sonido de los platillos. Podemos dividirlo en 2 partes: la primera, que va desde la lánguida Alphabet Song, luego pasa por el excelso crescendo de Brains (y su coda más electrónica Stem), por la angustiosa Lamb y termina en la decadente, pero seductora Candy. La división ocurre con el tema instrumental Lion In Winter pt. I, bastante aburrido. Aunque luego la cosa repunta gracias a Lion In Winter pt. II, Nova Anthem y la interesante (pero larguísima) In the End Is the Beginning, esta parte del álbum no llega a alcanzar la consistencia e intensidad de la primera.

Por otro lado, la temática de Nootropics es muy sugerente. F (JNSP también) la ha definido certeramente como “fringe”, aludiendo a la serie homónima que gira en torno a la ciencia alternativa. La evolución de la especie, el afán por trascender, la inteligencia artificial, la fusión entre biología y mecánica, son ideas que conjugan ciencia, ficción y filosofía y que toman cuerpo a través de la enigmática pluma de Jana, la letrista del grupo. Un trabajo apasionante con un toque de sofisticación intelectual, que aunque le pesen mucho los interludios, sería injusto que fuera olvidado en las listas de fin de año.

Canciones Imprescindibles: Alphabet Song, Brains + Stem, Lamb, Propagation, Candy.
Nota: 85/100

Grimes- Visions (2012)

Claire Boucher, más conocida como Grimes, es una chica de 24 años perteneciente a la escena experimental canadiense. Aunque su nombre nos empezó a resultar familiar sólo este año, ya lleva editados dos discos, Geidi Primes y Halfaxa, aunque es con Visions, que ha logrado gran repercusión en la crítica especializada. Este tercer disco viene de la mano del sello 4AD, responsable por editar otros discos indies destacados como el ya mencionado Lower Dens y otros que algún día comentaremos como el de Purity Ring y Twin Shadows. 

La propuesta musical de Grimes podriamos clasificarla como electro pop experimental, aunque para muchos esa etiqueta no debe significar nada, excepto que su música es rara. Y de hecho, lo es. La abundancia de arreglos electrónicos poco convencionales y la voz suave, aguda y a ratos casi infantil de Grimes, hace que se sienten atrevidas e innovadoras.  El disco está formado por 12 canciones pero algunas de ellas constituyen especies de transiciones o canciones de duración menor a 1 minuto, algunas interesantes como Infinity o Visiting Statues y otras fuera de lugar como Eight, pero en general bastante prescindibles. Eight de hecho funciona como punto de división entre dos dúos de canciones hermanas, las ochenteras Genesis y Oblivion y luego, las más electrónicas Circumambient y Vowels = space and time. Después del interludio de Visiting Statues, el disco continúa  con canciones de larga duración hasta practicamente el final. Destacan en este grupo de canciones, el climax electrónico y bailable del disco que es Be a Body y las etereas Nightmusic y Skin. 

Las letras en general son bastante simples, basadas en la repetición de versos como mantras. Varias de ellas aluden a la búsqueda de un otro, que la ayude a resolver sus problemas (Circumambient) o que la saque del olvido (Oblivion, donde espera que le pase algo malo en la oscuridad). También es una búsqueda del contacto corporal, probablemente aludiendo a la pérdida de interacción física, fruto del desarrollo tecnólogico (Be a Body y Skin). Así, Visions es un trabajo bastante postmoderno, siendo la experimentación rítmica y vocal la base de su atractivo. Otro disco que probablemente veremos en muchas listas de discos a fin de año.

Canciones imprescindibles: Genesis, Oblivion, Circumambient, Vowels = space and time, Be  A Body.

Nota: 82/100 
  

Hot Chip- In Our Heads (2012)

El quinto disco de este grupo británico liderado por Alexis Taylor y Joe Goddard viene a ser una confirmación de la madurez que ha alcanzado el sonido de la banda. In Our Heads no viene a ser un cambio de orientación respecto a lo escuchado en sus discos anteriores, pero es una propuesta bastante sólida y consistente, que abraza lo que mejor saben hacer estos chicos. Pop del bueno.

In Our Hands es básicamente una fiesta bien ochentera. No por nada el disco abre con un temazo bastante festivo llamado Motion Sickness, seguido por How Do You Do (próximo single), donde incluso sugiere que una iglesia no es para rezar sino para celebrar la luz que sangra a través del dolor. El clima ochentero (e incluso setentero) alcanza su climax en Don't Deny Your Heart y en Look At Where We Are llega el lento romanticón de la fiesta. These Chains vuelve un poco al electro-pop más actual y sirve de preludio para Night and Day, otro de los momentos potentes del disco. Flutes comete el pecado de extenderse demasiado pero no baja demasiado el nivel, mientras Now There Is Nothing y Ends of the Earth son "growers" como dirían por ahí. Let Me Be Him recuerda un poco el sonido de Take It In de One Life Stand pero tiene méritos propios para marcar su propia identidad. Always Been Your Love no me termina de convencer pero no es un mal tema para cerrar el disco. 

De este modo, In Our Hands es probablemente uno de los albumes más redondos de estos ingleses, sin desmerecer a One Life Stand, su disco anterior. Prácticamente no se siente que haya momentos de relleno y la mayoría de sus canciones son bastante inmediatas. Quizás peca de carecer de algún single extremadamente novedoso, pero todos ellos funcionan bastante bien como conjunto y no se opacan entre sí. Otro ejemplo de la madurez que ha alcanzado la banda.

Canciones Imprescindibles: Motion Sickness, How Do You Do, Night and Day, Look At Where We Are. 

Nota: 80/100

Chromatics- Kill For Love (2010)

Esta banda americana alcanzó notoriedad con su anterior disco, Night Drive y especialmente cuando Tick of The Clock fue incorporada dentro de la banda sonora de esa joyita hipster llamada Drive (película absolutamente recomendable para él que no la haya visto). Reminiscentes del italo-disco y de los sonidos ochenteros, Kill For Love, su cuarto album, constituye una ambiciosa banda sonora de pretensiones similares a las de M83 y su Hurry Up, We're Dreaming.

Mientras M83 apostaba por una instrumentación bastante épica (con harto saxofón). Chromatics construye sus temas de forma mucho más intimista. Han sido citados como fuente de inspiración por The xx, para que se hagan una idea. Los temas de Kill For Love parecen creados para una película de suspenso o misterio, en especial para escenas donde los personajes viajan o cambian de ambiente. Es un esfuerzo realmente admirable compuesto por 17 canciones, varias de ellas superando los 5 minutos de duración. Muchas de estas canciones son mayoritariamente instrumentales (The Page, Broken Mirror, The Eleventh Hour, Dust To Dust, There's a Light Out On The Horizon, No Escape). Dentro de los temas vocales, la voz hipnótica de Ruth Radelet ayuda a convertir muchas de ellas en temas bastante pegajosos, destacando Lady, Kill For Love, Back From The Grave, Candy y At Your Door. Por otro lado, Adam Miller pone su voz en These Streets Will Never Look The Same, un temazo de 8 minutos acompañado por un guitarreo incesante.  

Kill For Love es una apuesta muy interesante pero que debido a su longitud cuesta procesar a la primera escucha. Hay mucha canción eterea que cuesta recordar pero que van adquiriendo su encanto en sucesivas escuchas. Es un disco ideal para escuchar en viajes o caminatas, debido a sus logradas atmósferas. Vale la pena darle una oportunidad
Canciones Imprescindibles: Lady, Kill For Love, Back From The Grave, These Streets Will Never Look The Same.

Nota: 78/100

*Playlist*