Atlas Sound - Parallax (2011)

Es una linda coincidencia que terminemos otro año de vida bloggera dedicando una reseña a un disco que lleva la firma de Bradford Cox en él. El año pasado la última reseña fue sobre el excelente Halcyon Digest, uno de nuestros discos 2010. Las presentaciones ya fueron hechas en aquél post y desde ahí Bradford se ha hecho de un lugarcito inamovible en nuestros reproductores de música y en nuestros corazones de hipsters pobres.

Atlas Sound es un solitario, un marciano, un soñador 

y en Parallax, un optimista.

Unas pocas décadas atrás, hablar del disco solista del vocalista de alguna banda buena siempre era sinónimo de flop y bajas expectativas. Pero con este cabro Cox es distinto: Su interminable inspiración y el constante buen nivel de sus exploraciones musicales configuran una cadena que entrelaza íntimamente los trabajos de Deerhunter y Atlas Sound, proyectos que parecen no tener techo. Por eso esta servidora esperaba ansiosa y llena de expectativas el 8 de noviembre, fecha en que por fin podría escuchar o “conseguir” lo que estaba preparando Bradford ¿Seguiría siendo digno de las expectativas con Parallax?

Ráfagas de sonido y una partida de pinball dan el puntapié sonoro a 01. The Shakes: Una balada suave, pero no por ello insípida, se transforma en una melodía llena de reminiscencias que constituye un gran inicio. Puede parecer autobiográfica, porque habla de los inconvenientes de tener una fama temprana, pero según Bradford no lo es.

"Encontré fama y fortuna/ pero los hallé muy tarde"

“Found money and fame/ but i found them really late”

Luego en 02. Amplifiers encontramos al Atlas Sound de la era Logos. Más experimental, oscuro y repetitivo con una letra ambigua que puede estar hablando de su niñez, tema recurrente en sus letras. Aunque Amplifiers esté llena de recovecos, llega a un punto luminoso y crece con cada escucha. Parece un reverso oscuro de Basement Scene y el nivel se mantiene. En algunos pasajes la interpretación de AS me recuerda a Thom Yorke. 

"Y nos iremos a dormir/ Y tendremos sueños extraños"

"And we will go to sleep/ And we'll have such strange dreams"

También con un inicio algo repetitivo, 03.Te Amo es mucho más diáfana que su antecesora. Los sonidos acuosos-de cajita de música típicos de Bradford, que tan bien logró en Halcyon Digest, le quitan monotonía a esta canción que de romántica, solo tiene el título. Más suena a un reproche hacia alguien depresivo que no se empeña en ser amado “Te amo/ Pretendo que seas el único”

“Tu dolor probablemente es equivalente”

"Your pain is probably equal"

04. Parallax, el track que da nombre al disco, es una gran canción que tiene ese dejo espacial que poseen algunas canciones de Atlas Sound, combinado con un espíritu muy A.M. Es pegajosa y aunque parece alegre, posee una letra contundente que se refiere probablemente a una relación abusiva “Dame dolor/ dame moretones”. Un punto alto que da inicio a una seguidilla de buenos temas.

"Y espero que la tierra se abra/ y te trague a ti y a tu amor"

“And hope the ground opens up/ and swallows you and your love”

05. Modern Aquatic Nightsongs tiene la mejor letra de todas, el mejor título y musicalmente es una canción marciana como ella sola. La interpreto como esos momentos cuando la idea del amor es tan insoportable como “mil campanas tañendo” y odias a las parejas que te rodean...pero a la vez deseas estar en esa situación. La última estrofa es sencillamente genial, porque refleja esos sentimientos encontrados a través de una superposición de voces. Quizás no sea la favorita de muchos, pero en este álbum es el corte más atrevido, poseedor de una belleza fatal, como si fuera un trozo de kryptonita.

"Cuantas fantasías/ son interrumpidas por/

miles de galaxias/ que pasan flotando"

“How many fantasies/were interrupted by/

a thousand galaxies/that were floating by”

Luego de este momento intenso, 06. Mona Lisa nos saca de ese estado. La música de Bradford nunca sonó más accesible y dichosa, aunque se acercó con Walkabout. Su letra habla de ensoñación infantil. Su melodía es optimista, pero el coro “Your baby’s sleeping, sleeping” le da el toque oscuro típico de Atlas Sound. Como si hablara de su autor: una Mona Lisa viviente, con quien nunca se sabe si sus muecas esconden un pensamiento triste o feliz. Le sigue 07. Praying Man, una canción preciosa que también recuerda a Logos, pero es más expansiva y hasta nos regala unos “sha la la las” muy poperos. Una canción que habla de un creyente que siempre pone la otra mejilla y vuelve a levantarse, puede ser sarcástica o inspiradora según se la mire. Ese final con armónica es excelente. Uno de los growers del disco.

"Patéame mientras estoy inclinado - ¿porque no...?/

Me dejas pegado al suelo - me levantaré otra vez"

“Kick me while i’m down –why don’t you?/

Stick me in the ground – i’ll rise again”

Luego 08. Doldrums es un intermedio que baja las revoluciones de Parallax. Es una balada intimista, ambiental, y espacial a la vez. Tiene esa clase de solemnidad que recuerda mucho a los temas que cierran los discos de Radiohead, en este caso a Motion Picture Soundtrack, aunque Doldrums es una canción discreta.

"Mientras te hagas mayor - verás/ Que serás más como yo"

“The older you get – you’ll see/You’ll be a lot like me”

09. Angel Is Broken nos devuelve al Atlas Sound más pop, llama la atención desde un principio con sus cuerdas algo sucias. Aunque habla de como todo se echa a perder cuando envejecemos, suena optimista y hasta veraniega. Una excelente canción por donde se la mire. 10. Terra Incógnita es una canción que no pega mucho con el resto, pero es una de las claves del disco gracias a sus sonidos expansivos y depurados. La primera muestra, clara como el agua de que Bradford comenzó a abandonar su ostracismo sentimental. Ya la comentamos acá.

"He visto un futuro tan oscuro/ Lo describiría, pero/ 

tu mandíbula se caerá"

“I seen a future so dark/ I’d describe it but/ your jaw would drop”

11. Flagstaff retoma esa extraña introversión y esos sonidos acuosos propios de algunas composiciones de Logos como Attic Lights. Párrafos pesimistas acompañados al final de sonidos levemente Like Spinning Plates nos recuerdan la cara más oscura de Atlas Sound. 12. Lightworks: el disco se despide* en grande con un temazo rock and roll que va en la misma línea retro de Mona Lisa y Angel Is Broken. Su letra es decididamente optimista, la melodía es sencilla y tiene un coro fabuloso muy The Magic Numbers que estalla en un in crescendo que no sería lo mismo sin la armónica. Parece compuesta en un momento de feliz inspiración, se disfruta sin esfuerzo y es mi favorita del álbum.

"Dondequiera que mire/ hay una luz y/ no hay dolor"

“Everywhere I look/ there’s a light and/there’s no pain”

*Los Quarks (parte 1 y 2) de la edición japonesa son pura basura (sorry, Brad), suenan a alguien revolviendo un cajón de cachureos, así que no los considero parte del disco. Claramente son como "los niños que deben quedarse en sus casas para cuando toman el Simce para no bajarle el promedio al colegio".

Me quedo con el buen gustito que dejan los temas como Lightworks. Suena a luz, a esos fugaces momentos de felicidad estival, a estar sentado bajo un árbol mientras comes una fruta. A un placer sencillo que a la vez es remoto y nunca volverá. Algo nada sorprendente, porque Parallax fue grabado en verano y quizás por eso el resultado es óptimo en los cortes más pop (léase el quinteto Mona Lisa – Angel Is Broken – Lightworks – The Shakes – Parallax), que prevalecen sobre los momentos oscuros. 

Creo que Parallax es un buen disco, pero su fallo es que no logra mantener este ambiente “estival” a lo largo de todo el disco. Parallax no es cohesivo, porque cuesta encontrar los puentes que unen a Terra Incógnita con Midnight Aquatic Nightsongs (canciones lindas y extrañas) fuera de sus límites. Me temo que la secuenciación es la que refuerza esta idea, apuntando a alternar canciones con espíritus distintos tipo “canción triste – canción alegre” más que a generar una estructura. Recordaremos y disfrutaremos los mejores cortes de Parallax, pero será difícil recordar el disco completo.

Halcyon Digest > Parallax > Logos 

Deerhunter > Atlas Sound

En su trabajo previo, Logos, Atlas Sound sonaba como una persona aislada que se comunicaba a través de su música marciana, con algunas hermosas baladas de por medio. Y ahora en Parallax, si bien sigue sonando solitario y reflexivo, parece querer encontrar un puente y las baladas se toman el álbum. Un avance casi ilusorio que puede ayudar a definir algo grande en el futuro. Casi como el significado de Parallax, que es el aparente cambio de posición de un objeto según como se lo mire, herramienta útil para definir distancias en el espacio. 

#Pray4Bradford

Bradford mismo tiene tantas aristas que es fácil reconocer cuanto de su diversidad está en su música. Leí por ahí y coincido en que bajo la luz suave el anguloso rostro de Cox es atractivo, pero si intensificamos la luz sus facciones deformadas por el Síndrome de Marfan se revelan rudamente. No sabemos cuando puede pasar de ser parlanchín y confiado en una entrevista a sufrir una crisis de pánico. Quizás lo importante por ahora es que pese a estos cambios aparentes (parallax), uno de los artistas más complejos e interesantes de la década sigue estando activo y presente, a pesar de su enfermedad.

#Bradford4evr

En entrevistas sobre Parallax, Bradford ha declarado que este disco era distinto porque cuando lo hizo, ya no estaba “pensando en alguien” (love issues?), es más, no pensaba en nadie y que por eso este álbum suena más accesible y expansivo. Aun así, comenta que ese periodo creativo de Parallax ha quedado atrás y que no le apetece hablar de eso, pues ya está en otra cosa. Era que no. Esperamos terminar el próximo año reseñando un nuevo disco de Deerhunter o Atlas Sound, sabiendo que Parallax habrá marcado la pauta para ese disco que será aún mejor. C

Nota: 85/100

¡Le deseamos un #Feliz2012 a nuestros lectores (sean nuevos o antiguos)!