lunes, 18 de octubre de 2010

2010: El año de la música de Canadá

Al momento de evaluar la música del año 2009 junto a mi amiga C, nos dimos cuenta que en esa ocasión Australia fue el país que la llevó ese año, con una cosecha de la que salieron grupos como Temper Trap, LadyHawke y Empire of the Sun. Aunque este 2010 hemos tenido un par de discos australianos interesantes (Midnight Juggernauts, Miami Horror), el año se lo roba rotundamente nuestro nuevo país favorito: Canadá. Las razones del por qué te las damos en este especial de músicos canadienses.
 
Una conjunción de discos notables provenientes de esas tierras ha tenido cita durante este año. Podemos partir hablando del gran Forgiveness Rock Record de esa especie de selección nacional de Canadá llamada Broken Social Scene, una agrupación por donde han pasado casi 30 músicos como Emily Haines de Metric o Leslie Feist. Es una muestra de la versatilidad de la escena rockera canadiense y uno de los mejores discos de este año (Puede terminar de convencerte nuestra reseña del mes de julio de este disco).



Otro gupo de rock canadiense que retornó este año fue Arcade Fire, quienes habían dejado la vara alta con su anterior disco Neon Bible, pero se superaron con creces en esa obra maestra llamada The Suburbs, un disco repleto de hits de principio a fin (TheSuburbs,Ready to Start, Half Light II, Suburban War, We Used to Wait, Sprawl II, en fin el disco entero es imprescindible). El disco del año indiscutido y próximamente lo comentaremos con más detalle. 
 

Arcade Fire hasta ha sido portada de la revista Times
Por último, Hot Hot Heat, un grupo que probablemente muchos ubicaran por la continua rotación en Radio Zero o Radio Horizonte de su hit Middle of Nowhere, nos trajo el interesante Future Breeds, un disco no tan perfecto como los anteriores mencionados pero con un sonido potente que no aburre en ningún momento. Te pueden convencer canciones como Implosionatic, Times a Thousand o Goddess On The Prairie.



No solo rock le trae Canadá. El electrónico Caribou regresó después de su exitoso disco anterior Andorra, con el adictivo y único sonido de Swim, donde puedes encontrar hits notables como Odessa, Kaili y Found Out. Por la vereda aún más experimental nos encontramos con el homónimo regreso de Crystal Castles, donde Alice Glass deja un poco de lado el 8-bit y el sonido de Atari, mostrando su faceta más sensible y etérea hasta la fecha. Deja un poco de lado sus gritos tipo Love and Caring y su voz se vuelve incluso dulce en Celestica, Baptism o Suffocation. Swim y Crystal Castles son los mejores discos electrónicos del año y también hablaremos de ellos en profundidad próximamente. Además Crystal Castles vino a Chile en septiembre y Caribou lo hará este 23 de octubre, así que puntos extras por tomarnos en cuenta xD.

Caribou estará en Stgo este fin de semana. Vayan!
Por último otro disco que algún día comentaremos es Heartland del experimental Owen Pallett donde mezcla instrumentos clásicos y electrónicos en la proporción perfecta. Imprescindibles son temas como E Is for Estranged, Flare Gun, Keep the Dog Quiet o Lewis Takes Off His Shirt.


Se me pueden quedar algunos grupos fuera como el duo Chromeo (del cual no he escuchado su nuevo disco para opinar) pero toda esta conjunción de estrellas es suficiente para demostrar que Canadá se está convirtiendo un toda una potencia musical. Ojo que dentro de lo que queda del mes hablaremos in extenso de los discos prometidos en esta reseña…

Justin Bieber también es de Canadá pero ningún país es perfecto, cierto?

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